Dos hermanos

Thierry Le Portier hizo una selección de su colección de animales salvajes según su capacidad para cumplir los requisitos de las escenas en el guión y compró otros por sus habilidades especiales. Hizo traer de Estados Unidos dos tigres especializados en correr. Los adiestró a todos durante un periodo de seis meses en Puy-du-Fou y de este modo llegó al rodaje con animales que ya habían ensayado.

El guión está escrito por el propio director en colaboración con Alain Godard, con quien trabaja desde "El nombre de la rosa". Annaud pasó hace algunos años las Navidades con su familia en Socotra, una isla yemení cerca del cuerno de África. Allí comenzó a escribir un cuento en el que seguía a dos jóvenes tigres e hizo que nacieran en la parte del mundo que más le había impactado: las ruinas de Angkor. Sentado al lado de la tienda, con una lámpara de aceite, frente al Indico, cada tarde llenaba dos o tres páginas de la libreta antes de dormir. Cuando regresó de las vacaciones su mujer, que trabaja con él, sugirió que hiciera una película.

Annaud quería evitar los inconvenientes del 35mm que había padecido en "El Oso", ya que cuando se trabaja con animales es esencial dejar rodar a la cámara durante largos periodos a fin de captar el momento mágico. Con el 35mm, volver a cargar la cámara significa unos quince minutos que a menudo son cruciales. Pensó en el vídeo digital pero estaba convencido de que la calidad no sería suficiente para una película en "scope" e hizo un experimento muy sencillo: durante dos días colocó una clásica cámara de Panavisión al lado de una cámara digital de nueva generación. Filmó a uno de los tigres de Thierry Le Portier en el recinto que tenía en Puy-du-Fou, primero a pleno sol y después en la sombra del bosque. Aunque pensó que habría diferencias de grano entre ambas tras el montaje le resultó imposible diferenciarlas. Aún así, rodaron una pocas escenas en 35mm porque las cámaras digitales no tenían cámara lenta y para captar la mirada a menudo es necesario trabajar con 120 imágenes por segundo.

Por motivos de seguridad, cada escena con animales y personas fue filmada en un pase doble: primero los tigres y después los actores, en el mismo decorado. Las tomas se componen después durante la postproducción. En muy pocas ocasiones se recurrió a los efectos especiales en 3D. También utilizaron la animatrónica.

Se utilizaron treinta tigres en total, dieciocho de ellos cachorros. El mayor problema fue tener siempre disponibles cachorros de entre siete y doce semanas. Siguieron todos los nacimientos de tigres alrededor del mundo. Los zoos estaban notificados de la búsqueda y les mantenían al tanto.