Cisne negro

Black Swan (2010)

Curiosidades

El tono de llamada del celular de Nina es "El lago de los cisnes" de Tchaikovsky. Mas adelante esa canción vuelve a sonar pero en la escena final.
En la habitación de Nina, entre los peluches se encuentra un cisne negro.
Darren Aronofsky empezó a pensar en esta historia quince años antes de su estreno.
La película es intencionadamente un complemento a El Luchador, la anterior película de Darren Aronofsky.
Para convertirse en una bailarina Natalie Portman tuvo que trabajar durante diez meses, transformando su cuerpo. Los bailarines más estrictos se quedaron absolutamente impresionados con el trabajo que hizo.
Darren Aronofsky tuvo la posibilidad de expresar la visión de Cisne Negro que tenía desde hacía diez años gracias a un guión de Andrés Heinz, un drama oscuro que transcurría en Broadway, donde se creaba una peligrosa rivalidad entre una actriz y su misteriosa sustituta. Aronofsky se sintió intrigado, pero tras haber sido testigo de la terriblemente dura formación como bailarina de ballet de su hermana, quiso cambiar el contexto inicial por el estreno de una compañía de ballet en Nueva York. Esta modificación le condujo a la creación de los personajes de Nina y Lily, dos competitivas estrellas del ballet en ascenso, dispuestas a sacrificar absolutamente todo por conseguir la actuación perfecta.
Fue una ocurrencia de Darren Aronofsky unir la idea original de Andres Heinz con la historia que narra el ballet más popular del mundo, "El lago de los cisnes", un cuento que narra un dramático duelo entre la inocencia y la maldad. Mientras tanto, Aronofsky estaba trabajando también con Heyman en la creación del macabro e innovador giro que generaba la historia. En el borrador final, los elementos clave de la historia, cisnes, demonios, encantamientos y dobles personalidades, se entrelazaban con la mente de Nina, fraccionándose en fragmentos, como en una especie de kaleidoscopio psicosexual, que convertían a una ingenua joven en una criatura peligrosa y absolutamente transformada.
Darren Aronofsky y Mark Heyman llevaban años hablando de hacer un thriller sobre el mundo del ballet. Heyman encajó la trama de "El lago de los cisnes" por completo en el borrador inicial del guión. Eso lo cambió todo y se convirtió en el punto de partida de una moderna historia neoyorquina sobre la dualidad, la doble personalidad y el miedo a que alguien se pueda apoderar de tu vida.
Cuando el guión definitivo llegó a ser un mundo en sí mismo, Mark Heyman afirma que resultó cada vez más difícil enmarcarlo dentro de un género.
Antes incluso de finalizar el guión, Darren Aronofsky sabía quién interpretaría a Nina. Tenía que ser Natalie Portman.
Natalie Portman estudió ballet de pequeña.
Natalie Portman se comprometió a adecuarse a las inmensas demandas físicas y psicológicas de un papel que le exigía saltar, girar y perder el contacto con la realidad, todo al mismo tiempo.
Varios años antes de comenzar con el proyecto Darren Aronofsky contactó con Natalie Portman para hablarle de la película, por entonces todavía en ciernes. "Muy poco tiempo después empecé a pensar el concepto inicial de la película, y quedé para tomar café con Natalie en Times Square", recuerda Darren Aronofsky. "Natalie había hecho mucho ballet antes de convertirse en actriz y había seguido haciéndolo durante años simplemente para estar en forma. Natalie me dijo enseguida que algo que siempre había querido hacer era interpretar a una bailarina". Aunque pasaron casi diez años desde su reunión hasta que el guión estuvo finalizado, cuando Portman lo leyó, se quedó fascinada por el tortuoso recorrido mental de Nina.
El entrenamiento físico de Natalie Portman fue más allá de lo que hubiera podido imaginar nunca, pues empezó a entrenarse intensivamente, con objetivos bien marcados y durante cinco horas cada día, incluso diez meses antes de que empezara la producción. Portman se preparó bajo la tutela de varios antiguos profesores y formadores profesionales del New York City Ballet, tales como Mary Helen Bowers, que le diseñaron un extenuante y completo programa de formación en tiempo récord.
"Hice muchos ejercicios de danza y también nadé mucho e hice pesas así como entrenamiento combinado para evitar lesiones, pues la danza es tremendamente dura para el cuerpo", comenta Natalie Portman. "Exige muchísimo esfuerzo retomar el ballet a los 28 años de edad. Aun cuando hayas tomado clases de danza con anterioridad, no eres consciente realmente de todo lo que cuesta conseguir un nivel de élite. Cada pequeño gesto tiene que ser muy concreto y estar lleno de delicadeza y elegancia. Yo ya sabía que iba a ser todo un reto, pero nunca sospeché lo realmente duro que iba a resultar físicamente".
Natalie Portman estudió psicología en Harvard, lo cual le proporcionó información adicional sobre la desintegración mental que sufre Nina y le permitió profundizar en la surrealista experiencia que sufre el personaje. "Yo veía a Nina como si estuviera atrapada en un ciclo de obsesión y compulsión”, afirma Portman. "El lado positivo para los artistas y bailarines es que concentrándote en tal grado puedes convertirte en un virtuoso, pero después hay un lado mucho más oscuro, un lado insano, donde te puedes encontrar completamente perdido. Desde ahí tenía que partir para interpretar a Nina".
Mila Kunis se sintió atraída inmediatamente por su salvajemente inhibido personaje y por la fascinante idea de interpretar a una bailarina a la que sin embargo la cruda realidad golpea provocándole una grave crisis. "Al principio yo tenía esa imagen de grandeza, de sentirte delicada llevando el tutú, pero nadie sabe lo exigente que es físicamente hasta que lo hace", afirma Kunis. "¡Tu cuerpo realmente tiene que pagar un peaje!".
Mila Kunis emprendió su adiestramiento y comenzó a estudiar los provocadores efectos que Lily causa sobre Nina. "La clave para interpretar a Lily es que ella tenía que ser exactamente lo contrario de Nina, el otro lado del espejo, en todas y cada una de sus manifestaciones", dice Kunis. "Incluso su forma de bailar es distinta. Nina es muy técnica y preciosa bailando, mientras que Lily baila de forma más salvaje, libre y espontánea. Toda la vida de Nina gira en torno al ballet, pero Lily come hamburguesas, va a fiestas, tiene sexo, tontea con las drogas y lo explora absolutamente todo. Lily es indudablemente la antítesis de Nina y personifica al Cisne Negro".
A Vincent Cassel le resultó imposible rehusar el papel. "Primero, porque se trataba de Darren Aronofsky, con quien siempre he querido trabajar. Luego, porque estaba Natalie Portman, a la que admiro desde hace años. Y finalmente, por la idea de trabajar en un thriller enmarcado dentro del mundo del ballet, que es algo muy interesante. Los ingredientes eran muy tentadores. Sabía que iba a ser algo muy oscuro pero también muy sensual. Más tarde descubrí que Mila Kunis y Winona Ryder iban a sumarse al proyecto y que yo iba a estar en medio de todas estas mujeres como si fuera el maestro de ceremonias. Por lo tanto, sinceramente, ¿cómo iba a negarme?", afirma Cassel con una sonrisa.
Para interpretar con veracidad el personaje de Thomas, Vincent Cassel se sumergió en una ardua investigación, estudiando las vidas y magnéticas personalidades de los más grandes coreógrafos del mundo, desde Balanchine hasta Baryshnikov. Adicionalmente, se inspiró observando al coreógrafo de la película, el renombrado bailarín Benjamin Millepied, del New York City Ballet. "Observar cómo interactuaba Benjamin con los bailarines y cómo actuaba me proporcionó mucha e interesante información", advierte Cassel.
A Winona Ryder y Barbara Hershey les atrajo el sistema de trabajo con los actores de Darren Aronofsky. "No tenía posibilidad de ensayar porque en ese momento me encontraba trabajando en otra película en Inglaterra", recuerda Hershey, "entonces Darren me pidió que hiciera algo que me pareció muy inteligente. Me dijo que escribiera dos cartas a Nina como si fuera mi personaje. Por lo tanto, mientras trabajaba en el otro proyecto, ya pensaba en la relación que mantenían Nina y su madre. En cuanto me puse a escribir, el personaje simplemente empezó a hablar. Posteriormente, Darren le entregaba esas cartas a Natalie en los momentos más estratégicos".
Darren Aronofsky reclutó a una compañía de ballet dirigida por el coreógrafo Benjamin Millepied, estrella de la danza del New York City Ballet y creador de coreografías de ballet mundialmente reconocido. Aunque se trataba de su primera experiencia coreográfica para la gran pantalla, Millepied aceptó inmediatamente. "Estuve presente en todo el proceso, y los actores me sorprendieron mucho", afirma Millepied.
Benjamin Millepied interpreta a David, el primer bailarín de la compañía.
Benjamin Millepied tuvo que tomar los momentos más importantes de "El lago de los cisnes" y coreografiarlos de manera que quedaran perfectamente integrados con la visión cinematográfica que Darren Aronofsky quería dar a la idea de Thomas Leroy de una producción original y "revitalizada", y que, al mismo tiempo, pudiera ser ejecutada por dos actrices que, aunque muy voluntariosas, no eran bailarinas de toda la vida.
"Para Darren Aronofsky era verdaderamente importante mantenerse fiel al ballet de "El lago de los cisnes" real", afirma Benjamin Millepied. "Pero ambos sabíamos que era imposible formar a alguien para ser primera bailarina en seis meses, por tanto, nos esforzamos mucho en elegir movimientos concretos para Natalie Portman y Mila Kunis que funcionaran en la película. Natalie ya había tomado clases de danza antes de conocerme y había recibido alguna formación en la infancia, pero Mila no tenía ninguna formación en absoluto. Por lo tanto, mi verdadera labor consistió en afinar sus movimientos y utilizar la coreografía para sacar de ellas lo que el filme requería. Afortunadamente, Darren posee un gran conocimiento de lo que es la danza, lo cual hizo mi trabajo mucho más fácil".

Autores, bibliografía: Tepasmas bernatirapu73 Lalachan