E.T. El extraterrestre

E.T. the Extra-Terrestrial (1982)

Curiosidades

Desde siempre se ha dicho que las siglas de E.T. significan "Extraterrestre", pero esto no es así. En realidad es la primera y última letra del nombre del niño protagonista: Elliot, E y T.
Hay un par de alusiones a Star Wars, se puede ver a alguien disfrazado de Yoda y Elliott tiene muñecos de Han Solo y Greedo.
En "Star Wars: Episodio III - La venganza de los Sith" se puede ver que una de las tribunas planetarias del senado está ocupada por 4 alienígenas de la raza de E.T.
Spielberg gastó casi cuatro millones de dólares -gran parte del presupuesto inicial- en la creación de varios E.T. (mecánicos y electrónicos) que fueran creíbles, convincentes y capaces de suscitar emociones.
El ahora popular y polémico juego de rol salía en la película. Además un insulto de los que se dicen es "cero en carisma".
La idea de que E.T. se esconda junto con los muñecos para que no lo descubra la madre de Elliot, fue idea de Robert Zemeckis.
En la película no se enfoca a ningún "adulto" sino hasta que aparece Peter Coyote. A partir de ese momento, intervienen planos de adultos (exceptuando a la mamá que sí aparece antes).
A pesar de lo que se cree no fue la primera película de Drew Barrymore.
Steven Spielberg afirmó que el tema central de la película no era la amistad entre dos seres sino la situación emocional de los niños cuando sus padres se divorcian.
El actor enano Pat Billon, que murió a las pocas semanas de rodar el filme, hizo de E.T. en la secuencia en que Elliot y Gertie se lo llevan a dar un paseo, cubierto por una sábana. Otra actriz enana, Tamara de Treux (medía 88 centímetros y tenía 22 años), actúa por el muñeco en la secuencia final. Y un muchacho sin piernas, Matthew de Merrit, camina sobre sus manos -en el papel de E.T.- en la escena del frigorífico.
Algunas secuencias necesitaron el movimiento de un ser humano para resultar verosímiles. Pese a sus negativas iniciales, Spielberg tuvo que recurrir a un enano enfundado en un traje de goma para casi todas las secuencias en las que vemos caminar al extraterrestre, ya que si no tendrían que haber gastado dos millones de dólares, para hacer que E.T. caminase sobre sus propias piernas.
Debido al éxito que tuvo en el cine, estuvo en cartelera durante doce meses.
El rodaje se realizó casi enteramente según el orden que vemos en la pantalla: las escenas del aterrizaje de una nave alienígena en el bosque (el espectáculo de formas, sombras y colores que componen la secuencia de apertura) fueron el banco de pruebas para todo el resto de la producción.
La filmación de la película resultó mucho más laboriosa de lo que el director había pensado en un principio. Comenzó en septiembre de 1981 y se demoró hasta febrero de 1982; y durante esos cinco meses se trabajó a un ritmo desesperadamente lento por las dificultades técnicas y por la grabación de tomas simuladas, en previsión de los efectos especiales.
Fue en esta película en la que Spielberg abandonó definitivamente el uso del story board. Hasta entonces, solía utilizar un amplio despliegue visual en sus producciones (cerca de 2.500 dibujos o viñetas) para cubrir cada toma de la futura película. Pero en E.T. -y con excepción de las tomas previstas para efectos especiales, que tenían perfectamente planificados los encuadres y las fuentes de luz en cada plano-, Steven prefirió un método de filmación mucho más ágil y espontáneo: quería llegar al set con sólo una idea general de lo que quería hacer.
Fue la primera película hecha por la compañía de Spielberg (Amblin Entertainment) y por eso su logo es un chico sobre una BMX.
La película se iba a llamar originalmente "La vida de un chico (A boy´s life)", "Cielos nocturnos (Night skies)" ó "E.T y yo (E.T and me)".
En la película E.T. se cruza por la calle con un niño disfrazado de Yoda, al tiempo que suenan unos acordes de "El Imperio Contraataca".
El estilo de la cinta, planos cortos y rápidos, con anécdotas cómicas que acompañan las canciones de los Beatles, se ha considerado por parte de muchos como precursor del nacimiento de los vídeos musicales.
Para la voz de E.T., y después de probar a diversas actrices (entre ellas Debra Winger), se contrató a la profesora de locución Pat Welsh, una anciana con problemas respiratorios producto del tabaco, que dobló al personaje en todas las lenguas.

Autores, bibliografía: filasiete.com Jose Ramon Apollyon alex lagua alvitz Hernan Beider Diego Fotogramas Cinemagazine Cinemanía