En un principio el guión iba a correr a cargo de Brian Helgeland. La idea era darle un aire distinto a la saga convirtiéndola más en un cine policíaco de género y distanciándose del humor de la anterior entrega. Por cuestiones de fechas con el montaje de
Payback, fue Channing Gibson (que no tiene ningún lazo familiar con
Mel Gibson) quien escribió finalmente el libreto.